martes, 2 de noviembre de 2010

PROTESTAR ES UN DERECHO, REPRIMIR ES UN DELITO

 
Violencia estructural en México
En nuestro país vivimos una gran violencia estructural que es ejercida por instituciones y por las mismas personas que tienen mucho poder, es decir, por personas que tiene más dinero.                                                                            
La violencia estructural es aquella en la que se manifiestan tanto la falta de igualdad como la detención de los derechos que nos corresponden como ciudadanos de un país. Es un tipo de violencia permitida que viene junto muchas injusticias estructurales tanto económicas como sociales, ya sea por tu condición de pobre, por tus preferencias sociales o simplemente por tu color piel.
En México el 42% de la población viven en pobreza y casi el 14% vive en pobreza extrema, según el Banco Mundial, la pobreza en México es del 50% pero, también se sabe que si el hombre más rico del mundo (Carlos Slim) donara tan solo el 5% de su ingreso más 12 millones de mexicanas y mexicanos saldrían de la pobreza. Otro tipo de violencia estructural en nuestro país es que a los más pobres se les niegan además de sus derechos sociales, no tiene protección contra la violencia policial, se les niega el derecho igualatorio a las instituciones del Estado, sus domicilios pueden ser invadidos prácticamente por la ley, no solo eso sino que también están obligados a vivir una vida no solo de pobreza  sino también de humillación a casi diario, muchas veces consecuencias de las mimas fuerzas de seguridad que supuestamente deberían protegerlos.

Legalidad, Estado de Derecho, Democracia y Derechos Humanos
 Cuando el gobierno mexicano habla de esto, no está hablando de lo que sabemos que quiere decir sus conceptos sino lo hace de una manera en la que él pueda beneficiarse.
La legalidad de lo que nos habla el actual gobierno es una legalidad que consiste a la autorización legal de la violencia sin una ley que la penalice. Es decir que podría decirse que cubre a los delitos en discreción cometidos por funcionarios públicos corruptos de alto nivel haciendo pensar que son inocentes y que no hay pruebas que demuestre lo contrario, quedando está en la impunidad.
Ya han ocurrido casos similares como el Ulises Ruiz, Mario Martín, los dueños de la compañía Miera de México y el de la Mina Pasta de Conchos, entre otros. Mientras que para sancionar la protesta social se aplica toda la fuerza de la Ley, Legalidad y Estado de Derecho, con pocas o ninguna prueba, un caso impactante es el de lo sucedido en Atenco en donde los líderes de las protestas son condenados a casi 67 años de cárcel, mientras que los policías que violaron a 26 mujeres no fueron sancionados todo esto en nombre de la supuesta “Legalidad y Estado de Derecho”.
De tal manera que hace entender que el “Estado de Derecho” es lo más grande que tiene la ley, que es un como un imperio, pero no cualquier imperio, sino uno que puede hacer que la legalidad no exista y que quien las aplica también es un Estado con autoritarismo.
Por otra parte cuando el Gobierno habla de Democracia hace referencia a los resultados electorales aprobados por las instituciones correspondientes, se habla de una Democracia meramente procedimental y formal que se relaciona con un Estado de Derecho que no le da importancia, la democracia es como un sustantivo para los Derechos Humanos en donde garantiza todos los derechos, no solo los derechos de libertad sino también los derechos sociales y que al mismo tiempo no solo los asegura frente a los poderes públicos sino también frente a los poderes privados no solo federal, estatal,  municipal sino también internacional. Entre los casas importes que tiene la Democracia está la satisfacción de las necesidades humanas básicas (alimentación, vivienda, vestido, educación, trabajo). 
En cambio en México el derecho que acostumbra a dar no es más que hacer con nosotros lo que no debe “maltrata a quienes debe cuidar, acusa a quien debe proteger, persigue a quien, ignora a quien debe mayor atención, etc.” Se podría decir que hace todo lo contrario a lo es Democracia, Legalidad y Estado de Derecho. Cuando el gobierno mexicano habla de Legalidad y Estado de Derecho esta hablado de la detención de los derechos y de violencia institucionalizada.

ALUMNA: Alexa Merlyn Santiago Avendaño
GRUPO: 504
ASIGNATURA: Ciencia Tecnología Sociedad y Valores III

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